Hoy es noche de sombras de recuerdos-espada la soledad me tumba. Nadie que aguarde mi llegada con un beso y un ron y mil preguntas. La soledad retumba. Quiere estallar de rabia el corazón pero le brotan alas.
2 comentarios:
Anónimo
dijo...
Hace unas semanas, Dune,
[…] Barajando recuerdos me encontré con el tuyo. No dolía. Lo saqué de su estuche, sacudí sus raíces en el viento, lo puse a contraluz: Era un cristal pulido reflejando peces de colores, una flor sin espinas […]
Es todo un hallazgo esta autora, a la que pido perdón por permitirme la osadía de cortar su poema: “Barajando recuerdos” pero es que al leerlo me recordó lo que me pasó hace unas semanas. Lo que sigue del poema, concretamente, para el contexto de estos recuerdos míos, sobraba.
Conozco ese poema y creo que lo leí por primera vez en un correo de Marien.
Los seres humanos tenemos la increíble capacidad de "transformar" nuestros recuerdos de tal forma que, poco a poco, dejen de hacernos daño. O quizá es sólo el tiempo quien con su poso de polvo, va cubriendo sus aristas y convirtiéndolos en algo amable que acabamos recordando con dulzura. Gracias, K, por estar siempre ahí. Te echaré de menos.
2 comentarios:
Hace unas semanas, Dune,
[…] Barajando recuerdos
me encontré con el tuyo.
No dolía.
Lo saqué de su estuche,
sacudí sus raíces
en el viento,
lo puse a contraluz:
Era un cristal pulido
reflejando peces de colores,
una flor sin espinas […]
Es todo un hallazgo esta autora, a la que pido perdón por permitirme la osadía de cortar su poema: “Barajando recuerdos” pero es que al leerlo me recordó lo que me pasó hace unas semanas.
Lo que sigue del poema, concretamente, para el contexto de estos recuerdos míos, sobraba.
Conozco ese poema y creo que lo leí por primera vez en un correo de Marien.
Los seres humanos tenemos la increíble capacidad de "transformar" nuestros recuerdos de tal forma que, poco a poco, dejen de hacernos daño. O quizá es sólo el tiempo quien con su poso de polvo, va cubriendo sus aristas y convirtiéndolos en algo amable que acabamos recordando con dulzura.
Gracias, K, por estar siempre ahí. Te echaré de menos.
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